La ecografía, ultrasonografía o ecosonografía, es un procedimiento de imagenología que emplean los ecos de una emisión de ultrasonidos dirigida sobre un cuerpo u objeto como fuente de datos para formar una imagen de los órganos o masas internas con fines de diagnóstico. Un pequeño instrumento "similar a un micrófono" llamado transductor emite ondas de ultrasonidos. Estas ondas sonoras de alta frecuencia se transmiten hacia el área del cuerpo bajo estudio, y se recibe su eco. El transductor recoge el eco de las ondas sonoras y una computadora convierte este eco en una imagen que aparece en la pantalla.
El desarrollo de esta tecnología ha sido enorme en los últimos años; inicialmente se utilizó para el control de los embarazos, precisamente por no ser peligrosa; pero en la actualidad no hay especialidad médica que no la utilice en sus métodos diagnósticos. Sólo en las estructuras del cuerpo que tengan hueso o aire, la ecografía no es útil. En el resto de órganos y cavidades, es posible realizar una ecografía.
Entre los tipos de ecografía más usados tenemos: Ecografía abdominal, Ecografía abdominal pediátrica, Ecografía Pélvica, Ecografía Prostática, Ecografía Doppler, Ecografía Musculoesquelética, Ecografia Obstétrica, Ecografía Testicular, Ecografía de tiroides, etc.
Al ser un método de diagnóstico al alcance de la mano, no invasivo y que no emite radiación perjudicial para el paciente ni para el médico operador, las ecografías se han convertido en uno de los medios de diagnóstico más usados. Cabe resaltar que puede repetirse cuantas veces sea necesario. Además, la tecnología de punta con la que cuentan los nuevos equipos ha hecho que la calidad de las imágenes y la exactitud de los cálculos sea valiosa.
Normalmente se realiza a través de la piel, colocando un gel acuoso que sirve de contacto con la sonda que maneja el médico, el cual visualiza las imágenes en un monitor. Para determinados órganos es necesario introducir sondas especiales en el recto o la vagina para el estudio, así ocurre en los estudios de próstata o ginecológicos. En cualquier caso se toman las medidas de bioseguridad necesarias.
Dependiendo del órgano y sospecha clínica, se pueden encontrar tumores, malformaciones, quistes, tejidos inflamados, cambios en la conformación de un órgano, dilataciones de conductos, etc.
Probablemente la ecografía sea la prueba más inocua e indolora que se realiza para el estudio de enfermedades. Los ultrasonidos utilizados no producen ningún daño a adultos, niños o embriones y la potencia de emisión de los aparatos utilizados, garantiza que no producen daño a la salud.
